¡Viva el cine!

Cuando pensamos en los inicios del cine seguramente lo primero que se nos venga a la mente es una imagen de los hermanos Lumière, pero lo cierto es que hay otro nombre al que hay que referirse. Thomas Edison patentó, en 1891, el kinetoscopio, y en 1894 ya lo exhibía públicamente, un año antes de que los hermanos Lumière hicieran lo propio con el cinematógrafo. ¿Por qué, si Edison exhibió el kinetoscopio un año antes, no se le considera (al menos no popularmente) el inventor del séptimo arte? La respuesta viene dada por el hecho de que el kinetoscopio de (…)